“Nadie nos fuerza a estar en las redes”
EntrevistasPablo Boczkowski, autor del libro “Abundancia, la experiencia de vivir en un mundo pleno de información”, explicó en Radio 10 el uso de redes y dispositivos en la era digital y cómo éstos dan forma a nuestra experiencia cotidiana.
¿Los humanos tendremos la habilidad de enfrentar estas nuevas realidades?
Creo que sí, soy cautelosamente optimista, si uno lee la historia de la evolución de los medios y la comunicación uno ve que en cada momento hubo un cambio tecnológico y la primer reacción siempre fue pesimista: nos da miedo el cambio y tiende a haber una sensación de pánico moral cuando hay nuevas tecnologías de la comunicación. Pasó con la imprenta, decían que con la cantidad de libros que había se iba a corromper la mente de las personas y hoy en día no se nos ocurre pensar así, el discurso no solo exagera sino que hace daño.
¿Las redes sociales también nos dan cosas positivas?
Totalmente, los grupos marginalizados lo han estado por las inclusiones sociales e inclusive por los medios de comunicación.
Este alto nivel de exposición del asecho continuo de la gente, ¿puede terminaran siendo cansador, podemos retroceder en estos modos de vida?
Absolutamente, pero hay que entender que la exposición es voluntaria, nadie nos fuerza a estar en las redes, es tentador, son espacios seductores, es mucho más socialmente deseable que nos constituyamos como lo que somos “sujetos” y nos empoderemos y veamos hasta donde queremos llegar, a algunas personas les da placer. Yo soy fanático de la casa de papel, no veo mucha televisión, pero ese género de ficción me gusta y cuando salió la tercer temporada la vi en dos días y cuando salió la temporada cuatro estábamos de viaje y sin embargo miramos la serie, hay también un espacio de disfrute con eso.
“Nadie nos fuerza a estar en las redes, es tentador, son espacios seductores, es mucho más socialmente deseable que nos constituyamos como lo que somos “sujetos” y nos empoderemos y veamos hasta donde queremos llegar, a algunas personas les da placer.
Hay lugares en los medios tradicionales en el medio de todo esto, ¿cuál es el escenario que vos imaginas?
Los medios tradicionales se insertan en todo esto, pero con un rol secundario, la mayor parte de las cosas que nos informamos no tienen nada que ver con los medios tradicionales, no vamos a las redes para discutir las noticias. En cada una de las plataformas, sobre todo en Twitter hay un espacio para los medios, pero es secundario, esto es un problema porque al ser secundario y los anunciantes lo saben, ponen mucha más plata en las redes que en los medios, cuanta más plata tienen los medios, menos contenido pueden producir y más secundario se vuelve su rol.
¿Cómo es la anécdota de cuando eras chico que aguantabas bajo el agua y cuánto tardamos en tocar el teléfono?
Depende la circunstancia, el día de la semana o lo que estemos haciendo el teléfono está en otro lugar físico, no lo tengo ni cerca, cuando me quiero distraer sí, lo pongo cerca. Todos tenemos lo que yo llamo oasis personales o santuarios que varían por persona: algunos es la religión, terapia, seres queridos, parejas, todas las personas estamos descubriendo cuáles son las soluciones que nos funcionan. Demonizar es no entender el por qué, estamos tanto tiempo conectados, hasta qué punto no nos provoca angustia.










