LA DIMENSIÓN DE SARMIENTO Y EL PESO DEL PRIMER GOLPE DE ESTADO

Analizamos con el creador de @historiaparamillenials la figura histórica de Domingo Sarmiento y el peso institucional en la vida argentina del primer golpe de Estado de 1930.

“Sarmiento -cuando escribe Civilización y Barbarie- está diciendo que la Argentina se compone de esas dos fuerzas en pugna, pero su proyecto es la civilización, hay que superar el atraso, modernizar el país y para eso en la óptica de Sarmiento había que acabar con el caudillismo, con el federalismo y por eso tuvo una participación en sangrientos conflictos civiles y hay una frase que pasa la historia de Sarmiento que es “no economice sangre de gaucho pues este es un bien que solo sirve para abonar la tierra”. Así que de Sarmiento algunas cuestiones muy controversiales sí, pero a su vez es uno de los hombres que construye el Estado argentino y una idea de Nación”, definió el profesor de historia.

Sarmiento y los ferrocarriles

Ese proyecto de integración nacional era complejo y Sarmiento se proponía una Argentina moderna, no hay que quedarnos simplemente con que pedía combatir a los caudillos, porque también estaba en contra de la concentración de la tierra y decía que el modelo de la agricultura argentina tenía que ser más similar al estadounidense. Decía tengamos pueblos de medianos propietarios, de pequeños propietarios (ahí aparece la imagen de Chivilcoy) pensando en farmers dice: hombres que trabajan la tierra y se sientan ciudadanos del país y no peones de un terrateniente. Por eso la educación para Sarmiento ocupa un rol fundamental porque el proyecto que finalmente se aprueba en la época de Roca de la educación laica gratuita y obligatoria porque todos tenían que recibir la misma educación.

6 de septiembre de 1930: primer golpe de Estado

“El golpe del 30 inauguró una práctica que va a ser terriblemente costosa para la Argentina, ya que durante 53 años afrontó golpes de estado y soportó dictadura cívico-militares que sí fueron parte de un interés de ciertos sectores de la sociedad que no estaban preparados para vivir en democracia.

En ese momento gobernaba Yrigoyen su segunda presidencia Hipólito. Los conservadores, los radicales antipersonalistas y otros partidos políticos consideraban que el gobierno era demagógico corrupto y que no estaba capacitado para gobernar, que el país estaba en una crisis nacional (en ese contexto en realidad tenía más que ver con la crisis del capitalismo) y se apoya un golpe de Estado que protagoniza un general de corte fascista: José Félix Uriburu, junto a Agustín Pedro Justo.

Con una columna del Ejército argentino derroca al presidente y se propone instalar una dictadura cívico-militar que en su momento pensaba él iba a llevar a una sociedad al estilo del fascismo italiano.

Cuando se produce el golpe Estado, la Corte Suprema de Justicia hace un fallo en el que reconoce al gobierno de José Félix uriburu como un gobierno de facto y se crea una doctrina, una carátula jurídica, la idea de gobierno de factos que va a ser utilizada de ahora en adelante en cada golpe de dictadura.