“LA UBA ES LA HISTORIA MISMA DE NUESTRO PAÍS”
Entrevistas15 de marzo 2021El rector de la Universidad de Buenos Aires charló en exclusiva en Radio 10, después del lanzamiento de los festejos por el bicentenario de la casa de estudios. Dijo que “para el segundo semestre estima casi un 100 por ciento de presencialidad”.
¿Cómo está la UBA en pandemia y ante sus festejos por los 200 años?
Desde el inicio de la pandemia estuvimos trabajando con la Secretaría de Políticas Universitarias, con el Ministerio de Educación de la Nación y a través de ellos con el Ministerio de la Salud de la Ciudad en ir avanzando de acuerdo cómo estaba la situación epidemiológica de acuerdo a los distintos protocolos. Hoy estamos en una situación que nos permite que la mayoría de las clases se van a seguir dando a medida que vayan avanzando las vacunaciones. El inicio de los cuatrimestres serán virtuales pero se pueden dar la práctica de todas las materias esenciales y esto ya se está haciendo en carreras como Odontología, Medicina, Farmacia y Bioquímica, Ciencias Exactas y Naturales, Agronomía, Veterinaria, Psicología, algunas de Ingeniería, lo que hace que estemos llegando a un sistema híbrido en forma paulatina, aumentando la presencialidad de acuerdo a la situación epidemiológica.
¿Cuándo imagina que se puede volver a la presencialidad total?
La pandemia nos enseñó que no podemos imaginarnos mucho, pero añoramos y esperamos que este operativo de vacunación tan masivo que se está realizando vaya rindiendo sus frutos y que la pandemia vaya menguando: esperamos que el segundo semestre, si no tenemos el 100 por ciento de presencialidad, estar mucho más avanzados de lo que estamos ahora. Por supuesto, todo va a estar de acuerdo a cómo vaya la pandemia, si se registran estas olas que epidemiológicamente se van produciendo, pero la Universidad está preparada para estos tres contextos, añorando fuertemente poder incrementar la presencialidad y de acá a fin de año ver si podemos tenerla en su plenitud.
¿Qué significan estos 200 años?
En lo personal y todo mi equipo de gestión, somos hombres y mujeres formados en la educación pública: un orgullo enorme y una responsabilidad mayúscula, porque estamos al frente de una institución que nació con la Patria, es una de las instituciones con mayor reconocimiento a nivel nacional, regional e internacional y la responsabilidad que significa estar al frente de una institución que le cambió y va a seguir cambiando la vida a miles de argentinos y argentinas.
La UBA es parte de la historia de nuestro país. Cuando nació en 1821 con Martín Rodríguez, el presbítero Sanz, el primer rector que venía del ala clerical pero era Convencional Constituyente de 1816, un hombre con ideas innovadoras y abiertas al futuro, entrega el Decreto de Formación a Martín Rodríguez y Bernardino Rivadavia, subministro de Gobierno. En ese momento, el país no existía como tal, cada una de las provincias eran autónomas y a partir de eso se fue caminando a lo que somos hoy. El presidente de la Nación actual, el gobernador de la provincia de Buenos Aires y el Jefe de Gobierno de la Ciudad vienen a sintetizar lo que era en ese momento era Martín Rodríguez. Se creó esta universidad para formar a los futuros dirigentes de la Argentina. Qué mejor fotografía que estas tres personas con ideologías diferentes, con orígenes diferentes, se formaron dentro de la UBA. Ahí está la pluralidad de ideas que nuestra Universidad tiene como pilares. Para nosotros, un orgullo inconmensurable.
¿Hay carreras que desaparecieron?
Por supuesto, es el devenir propio de los acontecimientos. Fueron carreras que se fueron modificando o fueron absorbidas por otras. La UBA nace con tres o cuatro carreras y una era Ciencias Morales y Teología, que hace muchísimos años que no damos porque somos una universidad laica. En el caso de Medicina, el protomedicato que daba lugar a la Facultad de Medicina y de ahí mismo salieron otras facultades como Farmacia, Odontología, Bioquímica y dentro de esas facultades se formaron carreras. La ciencia fue avanzando en el conocimiento y hoy es imposible que exista un Leonardo Da Vinci.
Nos toca festejar en pandemia, justo en contra de lo que es nuestra esencia. Me imaginaba un festejo con los salones llenos, haciendo actos masivos pero tenemos que hacerlo en forma virtual, con actos acotados, con protocolos.
La universidad tiene 5 premios Nobel y la Noche de los Bastones Largos, ¿qué son esas imágenes para la universidad pública argentina?
La UBA transitó todo lo bueno y todo lo malo que le tocó vivir a nuestro país en estos últimos 200 años. Tuvimos momentos espectaculares como fue la Reforma del 18, en el 49 el Decreto de no arancelamiento de gratuidad de la enseñanza y un dato importante es que todos los ministros que firmaron ese Decreto con Perón eran egresados formados en nuestra Universidad que llevaban una ley de movilidad ascendente como política de Estado, única en el país que permitió que miles podamos llegar a la universidad.
También vivimos la Noche de los Bastones Largos, los distintos autoritarismos que se ensañaron con la UBA por ser la más grande: emigraron científicos y la noche de 76 al 83 con miles de muertos y desaparecidos en nuestros claustros. Como todos nuestros pueblos, fuimos renaciendo y creciendo con más fuerza y hoy nos encontramos en un momento de esplendor, reconocidos internacionalmente y mirando el futuro con entusiasmo y tratando de ayudar a nuestro país a crear una sociedad más inclusiva y más democrática y un desarrollo para todos.
¿Qué le genera y que puede agregar con respecto al reconocimiento internacional?
El reconocimiento es al esfuerzo de miles y miles de docentes, graduadas, graduados, investigadoras, investigadores, no docentes, estudiantes que día a día hicieron y hacen nuestra universidad, el reconocimiento a su calidad, calidad científica, a su esfuerzo, a lo que significan nuestros profesionales en el mundo y los que dicen que la UBA no tienen esas consideraciones tienen ignorancia sobre el tema. La verdad es que en cualquier evaluación, la Universidad de Buenos Aires figura como una de las mejores de Latinoamérica y nuestros graduados y graduadas son reconocidos internacionalmente. El compromiso de seguir en calidad y lograr que sea más inclusiva, que es lo más importante, y trabajando con el resto de las Universidades Argentinas. En la Universidad pública no hay competencia, venimos a formar ciudadanos críticos con pensamientos críticos y la mejor capacidad científica, biológica y lograr que todo eso llegue a todas partes del país.
¿Mejoraría algo poner la Universidad pública arancelada o tomando examen de ingreso?
Desde que estudié en la Universidad, estos sectores siempre existieron, ideologías que quieren una sociedad elitista, incluso querían que sea una universidad arancelada y se tomara examen de ingreso. Si se puede arancelar en el examen de ingreso que solo puedan llegar los que pagan, somos exactamente lo contrario. Somos la demostración clara y cabal que la movilidad social ascendente existe, es posible, que llegamos a todas las clases sociales a pesar de la volatilidad políticay social de nuestro país y que podemos tener una universidad masiva con ingreso sin restricciones y de calidad, algo que es único en el mundo. Somos la única de ingreso irrestricto, gratuidad y masividad. Nuestros hermanos en los demás países latinoamericanos piden por tener una UBA. Tiene que ver con el proyecto de país, de sociedad que quieren las mayorías y las minorías, nosotros por supuesto siempre estamos del lado de las mayorías.
¿Qué se siente festejar estos 200 años?
Como dije anteriormente, un orgullo enorme. Nos toca festejar en pandemia, justo en contra de lo que es nuestra esencia. Me imaginaba un festejo con los salones llenos, haciendo actos masivos pero tenemos que hacerlo en forma virtual, con actos acotados, con protocolos. Seguirá siendo así mientras la pandemia no lo permita, esperemos que el 12 de agosto, que es el día central donde se crea la Universidad de Buenos Aires, podamos hacer un acto más masivo.
¿Qué te imaginas para el futuro?
No existe ningún proceso de desarrollo sostenido en el tiempo donde la universidad no haya tenido una acción relevante. La universidad tiene que ser parte de ese proceso de convergencia, de ideas, estar de acuerdo con algunas políticas de Estado, del desarrollo que esperamos del país. He sido convocado el Consejo Económico y Social, es un honor para nosotros, vamos a poner el mayor esfuerzo para trabajar en ese sentido y seguiremos trabajando en la calidad de nuestra enseñanza, apuntalando el conocimiento científico, el desarrollo de la ciencia, el enlace entre la ciencia y el mundo de la producción, lo que viene para el siglo XXI y esta sociedad del conocimiento.
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