Las universidades y el reciclaje
NoticiasAyer fue el día del reciclaje y hacemos un recorrido por las casas de estudio que emprendieron programas que protegen el medio ambiente.
El 17 de mayo se conmemora el Día Mundial del Reciclaje 2021 con el objetivo de concienciar a la población sobre la importancia de tratar los residuos de la manera oportuna para proteger el medio ambiente. Más allá que la pandemia aceleró cambios de conductas, Desde el Conocimiento buscó hacer un repaso por las universidades que están realizando programas al respecto y que hasta han puesto proyectos de investigación.
La UNC
En la Universidad Nacional de Córdoba, la Facultad de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales -a través de la Secretaría de Extensión- puso en marcha un nuevo Proyecto de Compromiso Social Estudiantil llamado “Plan de desarrollo integral del reciclaje en un circuito comercial”, que rabaja para contribuir a una Gestión Integral de los Residuos Sólidos Urbanos(RSU) económicamente eficiente, ambientalmente sustentable y socialmente inclusiva.
El proyecto se llevará a cabo conjuntamente con la cooperativa “La Esperanza” en la zona de estudio del circuito comercial de Avenida Recta Martinolli. A su vez, pretende impactar tanto en la generación de trabajo , como en la disminución del impacto ambiental generados por la recuperación de materiales por parte de los recuperadores urbanos. Debido a la situación económica general, se vuelve imperiosa necesidad de aumentar los ingresos de los miembros de la cooperativa y mejorar las condiciones de trabajo de los recuperadores que ya trabajan en la zona.
Adicionalmente se pretende contribuir al proceso de aprendizaje por parte de los integrantes de la cooperativa para que ellos sean capaces de replicar y adaptar la metodología de trabajo para otras zonas.
La UNSAM
Desde la UNSAM, su rector Carlos Greco destacó: “Pusimos en marcha la primera Mesa de Trabajo de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos (GIRSU) junto al Municipio de San Martín, cooperativas de reciclaje y distintas organizaciones civiles, políticas y universitarias comprometidas en la sustentabilidad del territorio de San Martín.
En esa lógica, el titular de la UNSAM dijo que “parte de San Martín se encuentra en condiciones de vulnerabilidad ambiental por la contaminación de sus suelos y es urgente tomar medidas y lograr una gestión integral de la problemática. La UNSAM está comprometida con su comunidad y trabajará para que esto sea una realidad”.
La UNR
La Universidad Nacional de Rosario lanzó un observatorio de residuos peligrosos para monitorear la contaminación ambiental, que está conformado, entre otros organismos, por el Observatorio Ambiental de esa casa.
El organismo se nutrirá de un equipo interdisciplinario que funcionará como un consejo directivo conformado por el Observatorio Ambiental de las UNR, a cargo de Matías N. De Bueno, German Tessmer, Director del Observatorio Económico y Social de la UNR, Darío Novara, director de Sustentabilidad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires. Será presidido por el actual secretario de Extensión Universitaria de la facultad de Ciencias Económicas y Estadística de la UNR, Laureano Sammartino.
El organismo tendrá como objetivo realizar un informe bimestral con los datos aportados por las Cámaras de Tratadores, para de esta manera crear el nuevo Indice de Generación y Tratamiento (IGT) con el objeto de contar con información pública ambiental verificada científicamente.
La UNCOMA
La Universidad Nacional del Comahue (UNComa) realizó una extensa encuesta para conocer las prácticas en los hogares sobre el tratamiento de los residuos plásticos en el Alto Valle.
Se estima que cada año los argentinos tiramos a la basura 13 millones de toneladas de plástico, el 90% nunca fue reciclado. Las tendencias son alarmantes a nivel mundial, pero para buscar soluciones es necesario saber en qué situación se encuentra el problema. Preocupadas por esto, investigadoras de la Universidad Nacional del Comahue (UNComa) y del CONICET lanzaron una encuesta para conocer la situación a nivel nacional.
“En agosto del 2020, iniciamos una encuesta para todo el país en la que preguntamos los hábitos de consumo de plástico en los hogares y evaluamos el nivel de conocimiento de las personas sobre diferentes conceptos asociados al mismo, sus alternativas y los efectos que tiene sobre el medio ambiente y la salud humana”, explicó la doctora en biología e investigadora del Grupo de Investigación y Divulgación de los Efectos de la Contaminación por Plásticos (INIBIOMA-CONICET/UNComa), Agustina di Virgilio.
La UNLP
Desde un concepto más innovador de reciclaje, la Universidad Nacional de La Plata promueve el trabajo de E-Basura, en el que dona computadoras a hospitales de la región como el San Roque de Gonnet, al Hospital Interzonal General de Agudos San Martín, al Hospital Ricardo Gutiérrez, al Hospital de Niños Sor María Ludovica y al Cuerpo de Evacuación y Primeros Auxilios (CEPA)

Las computadoras están completamente equipadas a partir del trabajo incansable y desinteresado que llevan adelante alumnos, docentes y Nodocentes en la planta de Tolosa, donde funciona el centro de reciclado de la UNLP.
“El objetivo siempre es claro, la idea es acercar tecnología y reducir esta brecha social y digital que se da en todos los ámbitos”, señaló Viviana Ambrosi, directora del Programa E-Basura.
La UNICEN
La Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires apostó por los ladrillos sustentables. En el Instituto de Física de los Materiales de la UNICEN, los investigadores Diego Velázquez y Marcelo Stipcich crearon dos tipos de ladrillos de hormigón que reemplazan el uso de piedras: uno con plástico y otro con telgopor.
Diego Velázquez puntualizó que uno de los principales objetivos es “la reinserción al mercado productivo local de plásticos no reciclables en la ciudad de Tandil, mediante el desarrollo de hormigones livianos para uso en la construcción”. Otro objetivo es generar puestos de trabajo con la fabricación de estos productos.
Los ladrillos de IFIMAT tienen ventajas frente a los tradicionales: “Tienen menor densidad, lo cual abarata el transporte y facilita la manipulación en obra; son mejores aislantes térmicos, y tienen mayor ductilidad, es decir, que se deforman mucho más antes de romperse, lo que brinda mayor resistencia ante vibraciones o temblores”, señaló el investigador.

El proyecto está en vinculado con una fundación y con una Pyme locales para desarrollar la fabricación hogareña a pequeña escala. No es necesario equipamiento muy sofisticado para desarrollarlos, aunque la mano de obra debe estar capacitada.
En definitiva, un repaso por algunas universidades que buscan concientizar y generar nuevas prácticas en distintos ámbitos, generando nuevas realidades económicas y sustentables.









