Los cambios en el etiquetado de alimentos
Entrevistas19 de julio 2021La ingeniera química UBA y docente de Ingeniería Química en el ITBA, Claudia Degrossi, explicó en Radio 10 qué elementos se introducirían con los cambios en la eventual ley de etiquetado de alimentos. Qué debería cambiar también.
¿Qué es importante en la lectura de los componentes de un alimento?
La etiqueta tiene mucha información y la sensación que nos pasa en @cazabacterias es que poca gente la mira. Yo empezaría con algunas cosas básicas como, por ejemplo, la lista de ingredientes: esto da un montón de información y con el rotulado frontal que se va a agregar va a ser mucha más, por lo tanto es importante que la gente empiece a conocer lo que está, para acostumbrarse a leer.
Una seguidora nos envió una etiqueta de carne embasada al vacío y tenía ingredientes porque estaba aditivada con agua y sal hasta un 10%, más algún estabilizante. Esto está permitido, pero lo que hace es cambiar la característica de la carne. Esta carne puede poseer ese aditivo en su interior y, por lo tanto, hay que cocinarla a más temperatura. Hay que acostumbrarse a mirar lo que uno compra, la lista de etiquetas e ingredientes nos da muchísima información.
¿Qué tenemos que saber cuando uno lee calorías? ¿Son importantes o no?
Ahí tiene mucho que ver pensar que a lo mejor comés un producto de altas calorías, más sodio o pocas fibras, pero después compensas con fruta y vegetales frescos el resto del día: no pasa nada que un producto que comiste durante el día tenga más calorías. Lo importante ahí es mirar cuántas tiene y el tamaño de la porción, porque otra cosa que pasa es que comemos un paquete entero pensando que esa es la porción y en realidad comiste dos porciones aportando el doble de sal, grasas saturadas, calorías etc.
Las porciones a veces son raras, como por ejemplo medio alfajor, una rebanada y media de pan. Entonces, tenemos que aprender a leer cuál es el tamaño de la porción y ver si queremos invertir las calorías que tenemos en el día en esa porción.
¿Hay una parte educativa?
Absolutamente. Y me parece que la ley es maravillosa para que la gente tenga más información, porque de acuerdo a las estadísticas hay una proporción de gente con sobrepeso que supera el 50%.
Esto no pasa solo por mejorar la etiqueta, hoy la gente no la mira y quizás cuando algo se repite mucho, queda. Por ejemplo, si muchos alimentos tienen estos octágonos negros, aparece en comunicación un riesgo llamado “Adán y Eva”: si todo tiene algo, yo no miro más y como.
Hay que trabajar mucho en la parte educativa para entender que me está diciendo ese octógono, esta tabla nutricional, el tamaño de la porción. Otra cosa muy útil es el porcentaje DD (dosis diaria) de sal, fibra u otro componente. Este dato hoy está pero en general no se mira, vuelvo a repetir, esto requiere muchísima educación.
¿Cuál es la importancia de entender lo que significa grasas saturadas?
Esto viene de la mano de los componentes naturales de los alimentos donde están las grasas y no se comportan de igual manera en el organismo. Por ejemplo, hay unas llamadas insaturadas y otras que todos sus carbonos tienen sus hidrógenos y se llaman saturadas, mientras que las insaturada no las comas en exceso es beneficioso, hay una cantidad de grasas como de hidratos de carbono y proteínas que conviene comerlas acorde a la edad y demás.
Las grasas saturadas no son beneficiosas y además tienen un riesgo de enfermedades no trasmisibles como por ejemplo algún problema cardiológico entonces, conviene comer una pequeña proporción.
La Ley que está por aprobarse, uno de los octógonos de advertencia es si tiene exceso de grasas saturadas, no es que está prohibido, sino que sepas lo que consumís. Podemos empezar a elegir lo que queremos comer en nuestro día y así tener una dieta más saludable.
“El modelo que se su pone que va a realizarse es el de México que expresa los límites en función de las calorías, por ejemplo un producto bajo en calorías va a tener más octógonos y es por cómo se elige el criterio”.
¿Qué debemos enseñarle a los chicos? ¿Esto es de por vida, para los adultos es otra cosa, estamos a tiempo?
Creo que estamos a tiempo, me apasiona la enseñanza y en “Caza Bacterias” trabajamos mucho para eso. Cuando mi hija estaba en primer grado le llevé a la maestra (para que les enseñara a escribir y leer) etiquetas de alimentos y así empezar a tocar los envases, llevarlo a sus casas y fue maravilloso, algo tan simple como guardar los envases y compartirlos con el colegio.
¿Qué es lo recomendable, que tengan más de qué y menos de qué?
Eso es variable según la edad y según las condiciones médicas de cada persona. Desde mi forma de vida es muy bueno que los chicos conozcan el sabor de los alimentos naturales, que empiecen a desarrollar un paladar entrenado, si uno le da alimentos elaborados con mucha azúcar o sal cada vez agregan más porque no la sienten. El secreto está en poder entrenar los sabores de los más chicos.
¿Por qué se oponen a la Ley?
No es fácil un rotulado como el que está por salir, en Europa tienen otros modelos, hay productos que no encajan, nada es perfecto en ninguna parte del mundo sobre el etiquetado.
Obviamente va a generar cambios en las empresas y tendrán que aggiornarse, no solo el etiquetado sirve sino que va de la mano de mucha educación.
El modelo que se su pone que va a realizarse es el de México que expresa los límites en función de las calorías, por ejemplo un producto bajo en calorías va a tener más octógonos y es por cómo se elige el criterio.
Otra cosa muy importante que veo en la gente que se enoja con los industrializados, si ves Instagram hay cosas caseras realizadas que también si lo envasaríamos tendría octógonos por eso digo que pasa también por educación, como cocinamos en casa.
¿Qué pasa con las gaseosas?
Las cosas light pueden ser en sodio y no en calorías, es muy trabajoso aprender a leer la etiqueta, tal vez no tiene azúcares agregados pero tiene propios que son un montón.