
“Los jóvenes no se preocupan por el dinero en el momento de elegir la carrera”
EntrevistasLa UBA realizó una jornada de orientación vocacional con visitas a las facultades de la zona, experimentos y demostraciones en espacios propios de la Universidad, charlas y talleres orientativos. La séptima edición se llamó #YoQuieroEstudiar y tuvo más de 7500 inscriptos a sus actividades gratuitas. ¿Qué tener en cuenta a la hora de elegir una carrera? Muchos interrogantes que respondió en Radio 10 Paula Quatrocchi, secretaria de Relaciones Institucionales, Cultura y Comunicación de la Universidad de Buenos Aires.
¿Cuántos son los inscriptos a este programa “Yo quiero estudiar”?
Es la séptima edición, fue interrumpida durante la pandemia, tuvimos 7500 inscriptos, algunos más que años anteriores, pero también incrementamos la cantidad de escuelas que se han incorporado con grupos completos.
Tratamos de innovar año tras año, creemos que es un aporte que hace la Universidad de Buenos Aires a un momento complejo que tiene que ver con la transición de la escuela secundaria a la universidad: éste acompañamiento es muy significativo y creemos que estas orientaciones vocacionales que hacemos durante todo el año con más de 110 actividades da una potencialidad significativa, donde se incluyen talleres, visitas guiadas, experimentos en los museos de las distintas universidades, orientaciones sobre el mundo del trabajo, sobre las carreras disponibles, charlas sobre campos ocupacionales.
¿Qué se pudo detectar de los miedos o inquietudes de los estudiantes?
El 30% expresa emoción, el otro 30% expresó miedo, un 20% ansiedad y el resto emociones ambivalentes porque no saben lo que les va a deparar el futuro.
La elección de una carrera es mucho más, porque es la construcción de un futuro, con la incertidumbre económica que hay en nuestro país, este tipo de actividades suman mucho porque uno necesita anclarse con ciertas seguridades.
Al mismo tiempo con éste relevamiento les preguntábamos qué cosas podían ver favorables en un futuro y aparecieron singularidades como la motivación personal y las capacidades personales, ambas orientadas hacia el futuro.
¿Existe un miedo sobre los contenidos?
Algo que no ha cambiado durante años es la preocupación sobre la organización del tiempo, en la escuela secundaria está todo organizado pero la vida universitaria es muy distinta, más del 60% debe trabajar y se vislumbran si esto es posible.
La información es un factor clave, mientras más herramientas tengan para elegir la carrera adecuada mejor.
¿Qué pasa con quienes aún haciendo el taller de orientación vocacional no pueden decidirse?
Trabajamos mucho con la reflexión sobre sí mismo e identificamos sus intereses, gustos, diferencias entre hobbies y carreras, son muy pocas las personas a las que le gusta una sola cosa y debemos evaluar como va a ser mi vida cotidiana y los campos ocupacionales que pueden ofrecer, se conoce solo el 20% de las carreras que oferta la universidad.
Hay una fuerte motivación en los jóvenes de poder hacer lo que les gusta, no se preocupan por el dinero en el momento de elegir la carrera.
Esta transición es una construcción de un rompe cabezas de información para poder organizarse a futuro.