
Los debates en la Semana Mundial de la Educación Superior de Barcelona
NoticiasAutoridades nacionales, rectores de universidades públicas nacionales y referentes participan esta semana en España de la III Conferencia Mundial de Educación Superior (CMES) que es impulsada por la UNESCO. Las agendas paralelas y la necesidad de repensar la universidad de la pospandemia.
El calor de Catalunia se ensambla esta semana con las temperaturas por el debate de la necesidad de repensar el rol de las universidades públicas en Iberoamérica. Es que hoy finaliza una serie de intercambios entre países de la región y el viejo continente que buscan reorientar los desafíos de la educación superior en los tiempos actuales.
Allí participaron una serie de funcionarios y autoridades de universidades públicas de la República Argentina, entre los que cabe destacar al Secretario de Políticas Universitarias, Oscar Alpa; la secretaria de Cooperación Educativa y Acciones Prioritarias del Ministerio de Educación, Andrea García, y la directora nacional de Cooperación Internacional, Marina Larrea, entre otros. Por las casas de educación superior estuvieron representando al país el presidente del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y rector de la UNL, Enrique Mammarella; el rector de UNSAM, Carlos Greco; el rector UNQ, Alfredo Alfonso; el titular de la UNAHUR, Walter Wallach; el rector UNNOBA, Guillermo Tamarit; el reciente reelecto UNSL, Víctor Moriñigo; entre otros participantes.

Estos siete días de actividades incluyeron la realización de la III Conferencia Mundial de Educación Superior (CMES) que es impulsada por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO). Reformular ideas y prácticas de la educación superior para garantizar el desarrollo sostenible para el planeta y la humanidad es el objetivo central de ese debate internacional.
El lema de este encuentro fue «Reinventando la Educación Superior para un Futuro Sostenible», y esta hoja de ruta responde a los desafíos enfrentados por la humanidad y el planeta, prestando especial atención a la disrupción mundial creada por la pandemia Covid-19.
En este contexto, el Espacio Latinoamericano y Caribeño de Educación Superior (ENLACES) presentó un documento con el objetivo de contribuir a la construcción de una propuesta de futuro para la Educación Superior (ES) que tenga en cuenta las diversidades regionales y al mismo tiempo exprese los anhelos de un sistema como parte esencial para el desarrollo sostenible.

Un antecedente de posturas encontradas
El Encuentro propone «abrir la puerta a nuevos modelos de educación superior que sean innovadores, creativos y visionarios; destacar las oportunidades y prioridades de la Educación Superior en la próxima década; anticipar y preparar a los jóvenes para su rol en la sociedad del mañana; allanar el camino para una futura comunidad de aprendizaje que incluya a todos los estudiantes permanentes; definir y preparar la hoja de ruta para una nueva era de los sistemas de Educación Superior».
Es en ese contexto, donde el Ministro de Educación, Jaime Perczyk, dijo hace unos días que Argentina ratifica su modelo de educación superior gratuita. A principios de este año, el CIN lanzó un comunicado en rechazo a que estas entidades «sean la voz de las universidades argentinas, su consejo de rectores y redes universitarias». Además, recordaron que en la Conferencia de Educación Regional realizada en el 2018 en Córdoba se rechazó «de manera muy firme que la educación superior sea un bien que haya que mercantilizar a través de bancos».
En una entrevista a Página 12, el titular de Educación adelantó y reivindicó la posición argentina: “El sistema universitario argentino es valorado en todo el mundo, no sólo en Latinoamérica. Esta idea de que tenemos una universidad que es gratuita, que es autónoma, que tiene libertad de cátedra y que es masiva representa, sin duda, una rara avis en el mundo y, para nosotros, es un orgullo”.