
“La idea es desarrollar una vacuna que prevenga la infección de Chagas”
EntrevistasEl Chagas es una de las 20 enfermedades que la OMS califica como desatendidas, y por ella fallecen unas 12.000 personas al año, en su mayoría en Latinoamérica. En Argentina hay 1,6 millones de infectados y 7 millones en riesgo. La UBA tiene en desarrollo una vacuna de última generación que ya se encuentra lista para comenzar su fase final de pruebas en humanos. Lo adelantó en C5N Emilio Malchiodi, director del Instituto de Estudios de la Inmunidad Humoral de la UBA/Conicet.
¿En qué instancia está ahora el proyecto?
El proyecto fue presentado en la comunidad económica europea, un proyecto a cinco años que comenzó en junio del 2019, se interrumpió dos años prácticamente por la pandemia. En este momento, hemos terminado los ensayos en la primera especie animal (con ratones) y se están desarrollando los experimentos en perros y en primates no humanos.
¿Es la previa a humanos?
Esto es lo que se llama la etapa preclínica que incluye numerosos pasos o grupos de trabajo. Por ejemplo, se estuvo desarrollando el antígeno en una calidad para utilizar en animales, una cosa es producirlo en el laboratorio y otra cosa empezar a producirlo en cantidad como para inmunizar animales grandes, no ratones. Para poder pasar a la fase 1 en humanos es necesario producir el antígeno con una calidad superior, muy superior y eso se está realizando en este momento.
¿Qué se busca?
La idea es desarrollar una vacuna que tenga capacidad de prevenir la infección, eso se llama vacuna profiláctica o preventiva. Y esa misma versión de esa vacuna para terapia, para pacientes que ya están infectados, tratando de cambiar lo que sería la respuesta inmune del individuo para controlar el parásito.
¿Qué es lo novedoso, descubrir lo no asintomático?
Sí, es muy importante. La enfermedad de Chagas tiene dos periodos muy característicos porque cuando la persona se infecta es un parásito que no da muchas manifestaciones, entonces muchas veces pasa inadvertida esa infección. Cuando se advierte hay signos, entonces es muy eficaz el tratamiento con los medicamentos que se utilizan. Esos medicamentos son muy eficientes para controlar el parásito en la infección aguda, el problema es que la mayoría de las veces no se nota. El parásito se refugia en tejidos musculares y se refugia ahí adentro y entonces el medicamento ya no lo afecta de la misma manera. Sería muy útil tener una vacuna que cambie la respuesta inmune de la persona y -junto con el medicamento la administración conjunta- ambos dieran una solución a ese digamos a esa infección Crónica
¿Quiénes trabajan en este proyecto?
El proyecto se está realizando en dos institutos de la UBA y del Conicet, que son el IDEHU, del cual soy director pero también se están realizando en el Impam. Todos los ensayos que tienen que ver con infecciones se hacen en el Instituto de Investigaciones en Microbiología y Parasitología Médica (IMPaM, CONICET-UBA), queda en Medicina de la Universidad de Buenos Aires. Pero el todo el proyecto involucra a 10 grupos que se encuentran en Europa porque cuando de esto se armó las disponibilidades en Argentina por ejemplo para generar un antígeno vacunal no estaban dadas esas condiciones y ahora con el Covid sí.
Hay mucha mayor capacidad y en ese momento hubo que hacer el consorcio junto con 10 grupos de Europa, son tres de Portugal, uno de España, otro de Francia, otro de Bélgica, otro de Hungría y tres más de Alemania. Es un consorcio muy grande porque el cuerpo de trabajo es enorme.